Agni es el fuego biológico que gobierna nuestro metabolismo. Nuestro agni clave para una buena salud o bien para desarrollar la enfermedad. Tiene funciones similares a las de pitta donde predomina el elemento fuego y es parte de las funciones de este dosha en el cuerpo; funciona como agente catalítico en la digestión y el metabolismo.
Físicamente el agni se manifiesta en nuestro chakra manipura (tercer chakra) como jugo gástrico que digiere y absorbe los nutrientes de los alimentos, pero a la vez está presente en cada tejido y célula y está sutilmente relacionado con el movimiento de vata (aire y éter), pues el aire en el cuerpo enciende el fuego. El agni que está en nuestro estómago e intestinos destruye los microorganismos, bacterias y toxinas preservando nuestra inmunidad.
A la vez la longevidad depende del agni, así como el entendimiento, la inteligencia y percepción, mantiene nuestro sistema hormonal, metabólico y enzimático. Mientras el agni funcione correctamente, los procesos de digestión y absorción operarán bien. Si el agni no funciona correctamente debido al desequilibrio de nuestros doshas, el metabolismo y nuestros sistemas se afectarán drásticamente, así como nuestra inmunidad, debido a fragmentos alimenticios que no se digieren acumulándose en el intestino grueso, convirtiéndose en ama (toxinas) que bloquea intestinos y otros canales y luego entra a la circulación general. Poco a poco se acumulará en los lugares débiles del cuerpo donde crea interferencia y estancamientos debilitando los órganos y reduciendo el mecanismo inmunológico de los tejidos afectados y finalmente manifestándose la enfermedad.
El Agni en Ayurveda es el fuego digestivo capaz de digerir el alimento y transformarlo para poder ser asimilado y metabolizado para que se convierta en energía o combustible para el cuerpo. Recordemos que todo lo que introducimos por nuestros sentidos es alimento: comida, agua, respiración, relaciones, conversaciones, experiencias, entorno, rutinas, etc.
Entonces el agni se convierte en una fuerza que va mucho más allá del simple proceso físico digestivo. Te permite diferenciar lo que necesitas de lo que no necesitas, lo que tu cuerpo acepta y lo que rechaza. El Agni te permite integrar aquello que te va servir para tu crecimiento y todo aquello que no te va a servir, saber eliminarlo. Te ayudará a saber que tienes que dejar entrar y asimilar en tu cuerpo, en tu mente y en tu alma.
De qué te alimentas, qué dejas pasar, qué digieres, que absorbes, qué almacenas, qué sueltas, qué eliminas, qué escuchas, qué miras, qué pensamientos rondan en ti, qué sentimientos prevalecen en mí.
Toda digestión débil (estreñimiento, hinchazón, gases, indigestión) nos está indicando siempre un desequilibrio en nuestra digestión mental y emocional, cosas en nuestra vida que no somos capaces de digerir.
Que hay personas o relaciones que no te sientan bien, que dejas entrar o que se quede quien no es, que no dejas entrar a nadie, o que no dejas salir a nadie, que no pones límites sanos, que no te estas valorando lo suficiente, que no confías en ti, que no confías en otros, que te conformas, que huyes, que evitas, que te evitas.
Es imposible tener una buena salud si nuestro Agni no está funcionando correctamente porque eso significa que hay una desconexión entre mente, corazón e intestino, que no sabemos diferenciar lo que nos nutre de lo tóxico, que no hemos aprendido a digerir ciertas situaciones y podemos terminar intoxicados sin que nos quede espacio para lo que si nos nutre.
El Agni es entonces el motor de nuestro cuerpo físico y de todas nuestras acciones ya que alimenta todos los sistemas metabólicos del cuerpo, entregándole energía a nuestro cuerpo físico, mental y emocional dándonos impulso, voluntad y coraje. Además esta energía limpia la sangre, regula la temperatura de todo nuestro cuerpo y regula nuestro sistema metabólico y hormonal.
Según el Ayurveda podemos diferenciar cuatro tipos de Agni:
Jataragni es el principal. Está ubicado en el estómago y en el intestino delgado. Es el encargado de digerir los alimentos. Dentro de él existen cuatro variaciones.
La hermosa noticia es que si existe un desbalance, este se puede corregir a través de cambios internos y externos. Tus pensamientos determinan tus emociones, y a través de estos actúo, creo hábitos y por lo tanto construyo mi realidad. Nadie mas que tu tiene el poder de transformarte
¿Qué tipo de Agni reconoces en ti?
Con amor,
Jo Lezaeta.